Este 26 de abril se celebra el Día de la Visibilidad Lésbica, una jornada para reconocer la lucha de las mujeres lesbianas en todo el mundo, visibilizar su realidad y exigir igualdad, respeto y representación en todos los ámbitos de la vida.
El Día de la Visibilidad Lésbica, que se celebra cada 26 de abril, pone el foco sobre una realidad que a menudo permanece silenciada: la de las mujeres que aman a otras mujeres y que, en pleno siglo XXI, siguen enfrentándose a múltiples formas de discriminación, violencia e invisibilidad.
La fecha nació en España en 2008 gracias al impulso del movimiento LGBTIQ+ y, desde entonces, ha sido adoptada por países como Ecuador, Colombia, México, Perú y Venezuela. Sin embargo, el reconocimiento de esta jornada varía según la geografía: Argentina conmemora la visibilidad lésbica el 7 de marzo en honor a Natalia «Pepa» Gaitán, asesinada en un crimen de odio; en Brasil se recuerda cada 29 de agosto tras el primer seminario de mujeres lesbianas; Chile lo celebra el 9 de julio en memoria de Mónica Briones, víctima del primer crimen de odio lesbofóbico documentado en el país; y Paraguay lo hace el 16 de septiembre, rememorando la valentía de Feliciana ‘Chana’ Coronel y su grupo de compañeras desde la cárcel del Buen Pastor.
Más allá de las fechas, lo que une estas conmemoraciones es una realidad compartida: la necesidad urgente de representación, derechos y seguridad. En muchos países, las mujeres lesbianas enfrentan discriminación institucional, laboral y social. Las barreras legales, como la falta de reconocimiento de sus uniones o la imposibilidad de registrar a sus hijas e hijos como madres legales, siguen marcando el día a día de muchas.
A esta situación se suma la ausencia de referentes en los medios de comunicación, la política, el deporte o la cultura, lo que perpetúa estereotipos y borra identidades. En algunos contextos, la invisibilidad se acompaña de violencia sexual, represión y castigos legales extremos: hoy, aún hay alrededor de 60 países que criminalizan las relaciones entre personas del mismo sexo.
La visibilidad lésbica no solo implica aparecer; significa poder vivir con dignidad, tener derechos garantizados y no temer por la propia seguridad. Por eso, este 26 de abril, se alzan las voces para reclamar una sociedad donde amar no sea un acto de valentía, sino un derecho reconocido y protegido.
En palabras que resuenan en esta jornada: la educación igualitaria, el respeto a la diversidad y la inclusión son los pilares de una sociedad justa. Y en esa construcción, la visibilidad lésbica es fundamental.
