Q

Francisco Quintero / Director de Diversos Magazine

El socialismo es feminista, obvio. Pero no todo feminismo puede ser socialista si se aferra a postulados totalitarios, de revancha o exclusión frente a colectivo alguno, personas determinadas o conceptos de identidad que afectan a personas por su diferencia. Se pierde cualquier razón si la que te inspira contiene cualquier atisbo de discriminación. En este caso las celebraciones y los vítores de las mujeres socialistas que aspavientaban contra la letra “Q”, sin lugar a duda alguna, cimbrean los pilares de igualdad que construyen la socialdemocracia del siglo XXI en Europa. Se confunden de adversario, inventan enemigos y rompen la alianza natural. Dividen en un juego kafkiano de protagonismos obsoletos que solo benefician a la caspa carca machista que están encantados de este hedor de mesa camilla de vencer eliminando la letra “Q”. Vengo a decirles que, aunque eliminen la letra el río es imparable, solo que no serán ellas las protagonistas de ese cambio, serán otras, otros u otres. No es posible ideario que no asuma la igualdad real para entender que las mujeres trans son mujeres y que cuando escribimos “+” es para incluir cualquier disidencia o diversidad sexual, de género, familiares y coporales.

La noticia saltó este fin de semana: la pírrica victoria de quitar una letra: la “Q”. Es difícil entender en España los avances de los derechos del colectivo LGTBIQ+ sin la participación de los gobiernos socialistas. El PSOE en materia de no discriminación se ha convertido en el plano internacional en un espejo donde mirarse: propuestas legales innovadores, jurídica y técnicamente impolutas, soportando los recursos de inconstitucionalidad de la derecha más rancia e hipócrita de Europa y, sobre todo, consiguiendo ensamblar derechos con el acompañamiento de la sociedad en la adopción como suyos de los mismos, si bien, no afectara a una amplia mayoría de la sociedad como es obvio. Y eso, se ha conseguido porque el relato de la diversidad se ha planteado desde la alianza general al respeto de todas y cada una de las opciones personales que se dan en la realidad, sin exclusión alguna.

No entender que feminismo y cualquier manifestación de diversidad sexual son y deben estar en la alianza pues persiguen lo mismo: respeto y dignidad desde parámetros de no discriminación, la búsqueda de desarrollos legislativos que corrijan las históricas discriminaciones y compensen esas desigualdades tan solo beneficia la mancha funesta de la ultraderecha que asola el planeta. Después de ultrajar a todas las letras del colectivo LGTBIQ+ así llevan ya varios lustros cuando les aplaude el conservadurismo, después si logran alguna victoria más, serán esos mismos ultras que las aplauden los que pensarán en ellas mismas como posibles derechos que derribar. La igualdad femenina y los derechos del colectivo LGTBIQ+ son los mismos objetivos para aniquilar por los de siempre, ahora más crecidos que nunca. Pero, encima, con los aplausos cómplices de celebración de mujeres socialistas, es difícil de entender compartiendo los mismos valores. Muy difícil de entender.

La tristeza y la decepción pueden ahogar leyendo esto. Sin embargo, lo de “pírrica victoria” es tal cual. Porque en realidad en esos debates del 41º Congreso Federal del PSOE, celebrado en Sevilla este pasado fin de semana, también se ha aprobado un listado ingente de medidas para luchar contra la discriminación y el odio que sufre de toda persona LGTBI, independientemente, de su edad por mayores o menores, por su situación laboral, por su sector productivo, por su situación de salud y otras muchas acepciones buscando la no estigmatización de la diferencia que supone la diversidad sexual. Además de innumerables propuestas que buscan una sociedad más justa e igualitaria. Todo esto hace que nos reconfortemos con el cónclave socialista, pero tal vez no les importó tanto la “Q” simplemente porque se hablaba de respeto, igualdad y equiparación de derechos por igual, también para ellas. Eduardo Galeano habló de las personas “sentipensantes” porque llevaban la razón y el corazón de la mano, por favor que esas celebraciones contra personas no os hagan perder la razón y el corazón que tanto han hecho por los derechos de todes.

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