Preocupación en Europa por la nueva ley búlgara que atenta contra los derechos LGTBIQ+

El Parlamento de Bulgaria aprobó el pasado miércoles una enmienda que prohíbe la «propaganda» LGTBIQ+ en las escuelas, lo que ha desencadenado una ola de indignación entre activistas de derechos humanos, quienes piden a la Unión Europea que tome medidas contundentes contra el país.

El miércoles, Bulgaria dio un paso que ha generado polémica tanto a nivel nacional como internacional al aprobar una ley que prohíbe la promoción de la «propaganda» LGTBIQ+ en las escuelas. Esta enmienda, introducida por el partido prorruso de extrema derecha Renacimiento, fue aprobada por una abrumadora mayoría en el Parlamento, con 159 votos a favor, 22 en contra y 12 abstenciones.

La nueva legislación prohíbe cualquier forma de promoción o incitación de ideas relacionadas con la orientación sexual no tradicional y la identidad de género distinta de la biológica en el sistema educativo búlgaro. La ley define la «orientación sexual no tradicional» como contraria al concepto legal búlgaro de atracción entre personas de sexos opuestos.

La reacción no se hizo esperar. Activistas y organizaciones de derechos humanos, como LevFem, Movilizaciones Feministas y LGTB Action, se manifestaron bajo el lema «¡Escuela para todos! Detengamos el odio!», mientras que grupos como Forbidden Colours, que defiende los derechos del colectivo LGTBIQ+ en toda la UE, emitieron fuertes condenas. En un comunicado, Forbidden Colours calificó la ley como «un ataque directo a los derechos humanos fundamentales de las personas LGTBIQ+, en particular de los niños»

La similitud de esta ley con las leyes rusas y húngaras contra la «propaganda» LGTBIQ+ ha generado especial preocupación entre los defensores de derechos humanos. Amnistía Internacional advirtió que esta ley podría generar un clima de miedo similar al que se ha visto en Hungría, donde la comunidad LGTBIQ+ ha sido empujada a la clandestinidad.

Los activistas han instado a la Unión Europea a no quedarse de brazos cruzados mientras uno de sus Estados miembros promulga leyes que atentan contra la seguridad y los derechos de las personas LGTBIQ+. Según Forbidden Colours, la Comisión Europea debe tomar medidas decisivas para defender los principios de igualdad y derechos humanos que forman el núcleo de la UE.

Bulgaria ha sido consistentemente criticada por su pobre desempeño en materia de derechos LGTBIQ+. En el último Rainbow Map, Bulgaria se ubicó en el puesto 38 de 48 países en Europa en cuanto a respeto a los derechos y libertades de las personas LGTBIQ+, con una puntuación de apenas 23,22%. En el contexto de la UE, Bulgaria ocupa el antepenúltimo lugar, superando solo a Rumanía y Polonia, lo que subraya la gravedad de la situación en el país.

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